Submundo.

Como si de un periscopio se tratara agudizo mis sentidos para entender este mundo.

En París, frente al Centro Georges Pompidou.

Colorterapia.

Una cerveza bien fría, por favor.
¿Tú también la prefieres rubia?

En blanco.

Se me antoja que cada uno de nosotros podríamos pintar un grafiti.

Calle Pensamiento, s/n.

Mentira.

Esta suela no deja marcas.

Ayer, en Conil, inaugurando la temporada de playa.

Esperando título ("con Marqués me vale")

La misma mirada, el mismo día, casi al mismo tiempo, dos fotos muy parecidas (ver blog con enlace abajo): una grúa, que representa el hoy (color), demoliendo un edificio que ya está siendo pasado (blanco y negro).

Este espacio se lo reservo a Wili para que escriba lo que quiera:

Mientras espero que me otorguen un título, dos desdichados se aproximan con sus cámaras. Sin darse cuenta componen un encuadre muy similar. Luego interpretan ese encuadre de manera muy diferente. Es la magia de la fotografía, infinidad de posibilidades de crear a partir de una misma situación. Me publican en sus blogs, acrecentando las diferencias creativas con sus comentarios. Se esfuerzan en buscarme un título, pero no saben que ya lo tengo: soy DESTRUCTOR (del pasado). ¡Pero estos canallas se guardaron dos instantes que jamás podré destruir!!

Willy, a vuestra disposición y encantado de este intercambio.






http://gmrfotografia.blogspot.com/

La hora del planeta.

Los dos con tres velas para sesenta minutos.
Desde casa, adheridos a la causa de WWF contra el cambio climático.

Plegaria energética.

Señor, ilumínanos en esta crisis.

Invocación desde la playa de Santa María, Cádiz.

Molinos.

¿Dónde dices? Pues yo no veo la mancha.
Homenaje a El Quijote, que nunca pisó París. Sino, otras historias habría contado.

Regalo.

Con dulzura le envolvió un beso en papel.

Lo que los niños nunca dejamos de frecuentar, tiendas de caramelos.

La guerra.

De un parpadeo a otro me invadió una violenta sensación de injusticia sin límites.
Si nos contamos, sólo unos poco afortunados disfrutamos la paz.

Tensión.

¡Dios mío! ¡La niña! ¡No está! ¡Estaba aquí hace un momento! ¡La niña!
Instantánea en un descuido, en la Caleta, Cádiz, hace unos días.

Fenómeno natural.

Tu sonrisa es un volcán de color.

Exterior de una tienda de regalos handmade.

Goodbye, Mr. Winter.

La primavera empieza a florecer los recuerdos de mi memoria.

Estampa de la Caleta hace una semana, Cádiz.

Ausencias.

Tu mirada triste pronunció un adiós que se ahogó en mi boca. Hoy sé que ya nunca más nos vimos.

Pastelería antigua a la ribera del río, en Burgos.

S.O.S.

¡Alicia, ven, llévame, llévame a tu país para siempre!

Anuncio de un nuevo estreno en la Puera del Sol, Madrid.

Sin falsos disfraces.

Coge mi mano desnuda entre las tuyas y no la sueltes nunca, por favor.
Escaparateando por Roma.

¡Stop!

Haz un alto en tu camino y cuéntate a tí mismo lo bien que te va todo. Después, sigue, como si nada. Y por favor, disimula, que pueden estar mirando.
Alegoría de la travesía del desierto que es la vida, a veces.

Ilusión óptica.

Los conceptos son sólo eso, conceptos.
A través del tiempo veré realidades diferentes, pero mantendré la misma mirada de siempre.

¡Que viene el lobo capitalista!

¡Shhhhh! No lloréis, que otros niños vendrán atraídos por los sollozos y se llevarán vuestra ropa.
Sábado de tiendas, cámara en mano.

¿Es...

... cultura?

Astro Sol, no te vuelvas a ir. Primera salida en bicicleta.

¡Ánimo!

No llores más, cielo.

A punto de que nos salgan branquias.

Huida hacia delante.

Mejor no pensar en lo que se nos viene encima.

Estatua de Cervantes en Valladolid.

A la luz de la luna.

Lo presiento; saldré a flote de esta cárcel de realidad.

Ventanuco del Baluarte de Santa Catalina, Cádiz.

Encuentro.

Me asomé a mirar y te sorprendí mirando.
Otra tienda de saneamientos, pero ésta en Roma.

El teatro de la vida.

Buenos días, son las siete de la mañana, un día más en radio antena, tu frecuencia amiga, sal de la cama y prepárate porque comienza el espectáculo...
Un escaparate de muebles sanitarios me sirve para escenificar la lucha del día a día.

El color de la ciudad...

... depende del tono y la saturación de las personas que la habitan.

Calle comercial de Roma, desde la Plaza de España.

No me des la lata.

¡Shhhh! ¿No ves que estoy contando?

Sala de exposición por Málaga.