Este blog existe porque existen los instantes, que son algo así como una imagen fija de un momento de nuestra existencia. Y existe porque existen las palabras, esas comunicadoras que se entrelazan para contarte cosas y para contar contigo...



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Amanda Mair:

Joven, 17 años. Sueca. Su primer disco, aún por salir, pero ya podemos ir escuchando algo. Sus inspiraciones musicales pasan por Melody Gardot, Feist, Sufjan Stevens y Bon Iver. Triunfará.
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viernes, 11 de junio de 2010

Juego.

Los dueños de esta antigua tienda han cerrado después de haber permanecido abierta al público durante varias generaciones.
Tú acabas de adquirir el negocio.
Te propongo: busca un nuevo nombre que sustituya al antiguo, dí que cosas venderías en tu nueva tienda y que cosas no venderías jamás en ella, y déjalo en un comentario.
Con tus ideas haré un nuevo post con las distintas versiones de comercio que imaginéis.
Os espero.
Los tímidos que vienen al blog pero nunca escriben, también están invitados.

9 comentarios:

  1. Que padre se ve la fachada.
    Me la imagino más bien en días de lluvia, me recuerda al art deco, así que vendería frascos antiguos, de vidrios y metales.
    Y le llamaría El alquimista.
    saludos

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  2. Vendería sueños... en "La morada del sol". Muchos sueños...
    Jamás vendería máscaras.
    Saludos.

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  3. Yo regalaria ilusiones a cambio de una sonrisa.
    "La casa del trueque"
    Saludos

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  4. Soy nueva por estos lares te descubrí ayer mientras buscaba una fotografía ..
    Me gusta el juego con permiso dejo el mío.

    * Cero, Principio y Fin*
    Vendería lineas rectas, curvas, baches, rarezas , tragedias griegas o modernas, despedidas y algún adiós con regreso.
    Aquello que se pueda contar, como a quien lo quiera ver, prismas de vida, la más cotidiana ..

    Y no vendería .... Los Silencios.

    Néctares

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  5. "Saluber Cor" se llamaría mi negocio. Vendería bálsamos para corazones rotos.

    Jamás vendería venganzas.

    Un abrazo

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  6. La tienda se llamaría “la chistera” y por arte de magia cada uno podría adquirir todas esas cosas que siempre sintió que la vida les ha ido debiendo. Todos estos adeudos se cobrarían para satisfacción del cliente con los correspondientes atrasos por la demora.
    Todos vivimos pensando que de algún modo la vida o alguien, Dios, la naturaleza etc., ha contraído una deuda con nosotros. Algo así leí de adolescente en un libro y para mi fue revelador. Claro, eso nos hace a veces sentir esa sensación de injusticia para con nosotros, la insatisfacción permanente de la deuda no satisfecha.
    Yo me compraría ese triciclo que mis padres devolvieron a la tienda por estar roto pero que no fue sustituido por ningún otro. Pero... ¿qué haría yo ahora con semejante velocípedo?

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  7. Yo vendería un cuento a cambio de una historia.
    Palabras, leyendas, puede que libros...

    Se llamaría "Cuento por cuento"

    Nunca vendería tristezas.

    Me encanta tu blog y tu propuesta.

    Saludos
    L;)

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  8. La tienda del encuentro
    Un lugar donde encontra y que te encuentren abstenganse de entrar egoistas y malhumorados ....


    me encanta

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  9. Vuestros comentarios ya forman parte del post "Dale al play"; gracias por interaccionar con el blog. Hay dos comentarios que han llegado tarde, aunque son igualmente bienvenidos. Atentos al próximo juego.

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